"Gracias al máster aprendí lo básico
de derecho, economía, marketing, etc., conocimientos que sin duda me
permitieron poder abordar con más rigor mis trabajos posteriores, además de
poder aplicarlos en mi vida diaria"
¿Por qué decidiste estudiar el Máster en Gestión Cultural de UIC Barcelona?
Después de licenciarme en Historia del Arte por la Universitat de
Barcelona, descubrí que me interesaba especialmente todo lo referente a la gestión
de proyectos artísticos y culturales en general. Durante la carrera ya había trabajado
en instituciones como la Fundació Miró y la prestigiosa Sala Parés, y me di
cuenta de que la organización de las exposiciones y eventos de tipo cultural
era con lo que me sentía más cómoda. Todo ello, sumado a la necesidad de
especializarme después de estudiar una carrera hizo que me interesara por el
máster en Gestión Cultural. ¿Y por qué la UIC? Porque se trataba de un máster internacional, una gran
variedad de profesores que estaban trabajando en activo en el arte y la cultura
actualmente y porque la visión general que
me ofrecía el máster a nivel académico me acabó de convencer que era la
mejor opción.
Actualmente trabajas en la Fundación Setba, ¿Puedes contarnos de qué se
trata la fundación y cómo has llegado allí?
La Fundació Setba es una fundación privada cultural con valor social.
Organizamos exposiciones y proyectos culturales siempre ligados a proyectos
sociales que la misma fundación idea y produce. Después de acabar el máster,
pasé un tiempo fuera de España trabajando en Londres y unos años más tarde con
una beca en Bruselas y a la vuelta y después de haber trabajado en diferentes espacios,
siempre relacionados con la cultura, conocí la Fundación, presenté mi
candidatura y afortunadamente me dieron el puesto de gestora cultural, dónde
sigo trabajando a día de hoy muy satisfecha.
¿Cuáles son tus
funciones?
Como gestora cultural,
me encargo de supervisar y coordinar los diferentes proyectos que llevamos a cabo, siempre dando apoyo a la directora de la fundación
que es quien plantea la línea de trabajo. Mis funciones son múltiples y variadas: desde atender al público a la
coordinación de todas las acciones que llevamos a cabo, pasando por el trabajo
más administrativo. El gestor cultural se ocupa de que todas las piezas
que hacen que funcionen los proyectos, encajen bien. Desde
las entidades para las que organizamos los proyectos, hasta las personas para
las que trabajamos, los artistas que colaboran con nosotros, y todo el personal
implicado en el proyecto, el transportista, el propietario del restaurante que
te ha propuesto un menú, el fotógrafo que ha decidido
sumarse a la causa, los voluntarios que se implican…
¿Qué conocimientos consideras haber adquirido en el Máster que influyeron
en lo que eres hoy como persona y como profesional?
La formación de la UIC me ha servido mucho ya que en un año de máster pude adquirir
los conocimientos básicos que me permitieron empezar a desarrollar mi trabajo
para seguir aprendiendo y formándome. En mi caso, por ejemplo, yo venía del
ámbito de las humanidades esencialmente y gracias al máster aprendí lo básico
de derecho, economía, marketing, etc., conocimientos que sin duda me permitieron
poder abordar con más rigor mis trabajos posteriores, además de poder
aplicarlos en mi vida diaria.
¿Tienes profesores favoritos que recuerdes?
La verdad es que cada uno de los profesores que tuve contribuyeron a mi formación
y aportaron valor a mi profesión de gestora cultural. Los recuerdo a todos. Si
tuviera que citar a una profesora, sería Antònia Maria Perelló,
conservadora y responsable de la Colección MACBA que nos habló de la gestión de
las artes visuales, sector al que yo sabía que me quería dedicar. A parte de
disfrutar mucho con sus clases y aprender mucho de su experiencia, fue alguien
a quien, tiempo después, recurrí para pedir orientación profesional, solucionar
dudas y siempre ha estado disponible. Le estoy muy agradecida.
¿Sigues en contacto con otros alumni de UIC Barcelona? ¿sabes a qué se
dedican?
Sí, con muchos compañeros. He procurado no perderles la pista, y las redes
sociales, sin duda, ayudan mucho en este sentido. Guardo especial amistad con alguno de ellos, con
Alberto y Lluís, con los que hice mi trabajo final de Máster, Mercedes, con
quien viví parte de mi experiencia en Londres, y con Ana que fue mi compañera
de piso durante unos años. Con otros
compañeros he mantenido contacto de tipo más profesional, hemos colaborado,
hemos resuelto dudas, nos hemos hecho consultas. En definitiva, compartimos conocimiento, algo
esencial, por otra parte, en nuestro ámbito profesional.