Los días 12, 13 y 14 de febrero, Fabra i Coats de Barcelona acogió Col·lectivaccions, un seminario sobre contextos de comisariado, formación y producción dirigido a artistas, diseñadores y mediadores emergentes. Durante tres días se abrió un espacio de formación teórico-práctico que se organizaba a través de tres ejes principales: fases de producción y montaje; concepción de un proyecto expositivo; y diálogos entre discursos comisariales y educativos.
Anna Fando, alumna del Máster Universitario en Gestión Cultural de la UIC asistió ha este evento y aquí nos escribe su reflexión sobre este seminario.
Col·lectivaccions, es una iniciativa formativa que se inserta en la ciudad de Barcelona. Esta dirigida por José Antonio Delgado, Rachel Fendler y Judit Vidiella en colaboración con Lonja ESDA, la Sala de Arte Joven y Fabra i Coats, entre otras entidades.
El fin: poner en debate y redefinir el concepto de “proyecto artístico” en un ámbito más global. Cabe decir que el seminario es solo una parte del trabajo que proponen ya que se trata de un proyecto aún más ambicioso.
El avance progresivo del arte y los cambios de paradigma hacen que los proyectos creativos que nacen de los creadores se preocupen por implicar a territorios y colectivos. Además la figura de los creadores a menudo está lejos de una escuela de arte, convirtiendo los proyectos creativos en algo más extenso y que interesa a otras disciplinas de investigación. Todas estas cuestiones forman las claves de este seminario.
Desde la década de los años 60 y 70 se manifiesta el concepto de arte como producción cultural. Esto da pie a ítems como el interés por la alteridad (directamente relacionado con términos de globalización) y el desmontaje del arte en arte en mayúsculas y arte en minúsculas que evidencian que en el arte se acepta un conflicto relacional entre sus mismos agentes. Proyectos de media art o site specific-art intentan responder a estas preocupaciones sin implicar demasiado a los agentes en su totalidad.
Así, el seminario pretende presentar todas esas iniciativas que intentan, mediante la deconstrucción crítica, trabajar con medios altermativos de exposición con finales cambiantes según la necesidad de cada proyecto y alterar/cuestionar las políticas de relación en los centros de arte. Se desarrolla una crítica al comisariado occidental de la autoría y el white box. Pues ésta última solo oculta, bajo la propia pared, los sistemas de mediación, haciendo que ni siquiera se enseñen en las escuelas de arte. Es por eso que se invitó a trabajar a escuelas de arte en el seminario para recalcar el papel de la educación y que ésta presente el sistema de relaciones actual.
Nora Ancarola, directora de la Escuela Llotja, apuntó la importancia de mostrar a los alumnos que los proyectos de creación deberían tener en cuenta su propia exposición y montaje, su influencia sobre un territorio específico y la implicación de agentes diversos. Además deberían partir de cero, sin dejarse influenciar con la forma predeterminada de terminar un proyecto.
Alberto Peral de Half House y Mireia C. Saladrigues se encargaron de mostrar ejemplos de montajes alternativos y proyectos de creación en el ámbito de la educación. Mireia expuso su experiencia EnResidència, un proyecto de residencia artística que se realiza en un instituto público con alumnos de primero y segundo de la ESO (12-14 años). Eso aporta a los alumnos la experiencia de un proyecto de creación desde cero y abierto a cualquier resultado (en este caso: la edición de un fanzine y una acción performática de 60 alumnos en las rampas del MACBA).
La intención de Col·lectivaccions fue analizar los roles del sector cultural. Educación, gestión, comisariado y creación funden sus límites para trabajar en proyectos más envolventes que piden cada uno una producción y un montaje específicos; quedando muchas veces lejos de lo que sería un proyecto expositivo convencional acabado en el montaje de obras en una pared. Los artistas trasgreden, los proyectos trasgreden, pero la educación y los agentes culturales también se disponen a trabajar para trasgredir aún cuando una sala expositiva desarrolla proyectos que no acaban en la misma sala. Son ejemplos LaSala d’art Jove y SantAndreu Contemporani, que se presentaron como instituciones culturales que están mutando sus propias políticas de relación.
También se presentaron proyectos concretos que englobaron a todos los agentes y donde precisamente se había intentado experimentar con los roles como Artfònic, Sinapsis y Transductores. Todos ellos reivindicaban un cambio estructural, una gestión de ritmos y tiempos distinta (que no los conciba como la búsqueda de un producto final), la importancia de las prácticas colaborativas del diseño y de la educación, y la voluntad de trabajar en red como laboratorios de ciudadanía.
Para concluir, resumiría Col·lectivaccions en un concepto: experimental. Nuevos modelos comportan nuevos formatos. Una concepción experimental de los procesos creativos y culturales tendrá como resultado un modelo flexible donde los procesos implicativos y de creación adquirirán la misma importancia que la exposición final.
Anna Fando (Barcelona, 1990) es artista y gestora cultural. Se licenció en Bellas Artes en la Universitat de Barcelona (2008-2012) y posteriormente estudió el Máster en Gestión Cultural en la Universitat Internacional de Catalunya (2012-2013). Como artista su obra se ha presentado en múltiples lugares de ámbito local como La Galería Cadàver Exquisit, Sala d’Art Jove, Untitled BCN, el Centro de Arte Mutuo o la propia Universitat de Barcelona. También ha presentado obra en Terrassa, en Lloret de mar y en Santiago de Compostela. Como gestora cultural ha hecho sus prácticas profesionales en la Galeria Senda de Barcelona y posteriormente ha trabajado como asistente en la misma. Actualmente desarrolla proyectos de comisariado alternativos. Y hoy mismo estrena la exposición “Cos quotidià”, a las 20:00h en la Sala Joan Alsina de la Farinera del Clot.