La inquietud y la puesta en valor de la recopilación de datos por parte de los gobiernos comenzó con el censo poblacional de Estados Unidos en 1880. La influencia del censo derivó en la invención de la máquina tabuladora de Herman Hollerith, que fue el primer sistema para la recopilación y comparación de datos. Esta máquina hizo que Herman Hollerith se convirtiera en emprendedor y su empresa pasó a formar parte de lo que hoy en día conocemos como IBM (International Business Machines Corp).
El concepto de Big Data aparece en 2013 en el ensayo de Viktor Mayer-Schönberger, “Big data: La revolución de los datos masivos”. Es una metodología de trabajo que nos permite recopilar datos de Internet y saber cómo se mueven estos datos en el mundo. Esta metodología requiere de diversas herramientas de software que nos permiten recopilar los datos, analizar las estadísticas y comprender el comportamiento de las personas en el mundo entero. Las dificultades más habituales vinculadas a la gestión de estas cantidades de datos se centran en la captura, el almacenamiento, la búsqueda, análisis, y visualización. Existe una gran variedad de software que procesa los resultados y los muestra de diversas maneras (Tablas, PDF, Gráficos, Animaciones 3D). Hadoop, NoSQL, Apache Cassandra, Machine Learning, MapReduce son sólo algunos de los más conocidos, aunque quizás la manera más sencilla para comenzar es usar una base de datos de Excel.
El Big Data ofrece un gran potencial aplicado a las audiencias y a la financiación, por ello el sector cultural también recurre a estas herramientas para plantear nuevos modelos de negocio. Claire Round y Cimeon Ellerton nos presentaron en Pública 15 su experiencia con el desarrollo de Arts Data Impact (ADI) que implanta el primer Data Científico de las Artes en la English National Opera.
Arts Data Impact (ADI) es un proyecto de I+D que entrecruza los datos recopilados por la English National Opera y otras 500 organizaciones culturales del Reino Unido sobre los perfiles de sus públicos. Esta gran base de datos “dibuja” el perfil del público tomando modelos “metroculturales”, cuyos modelos permiten identificar los valores de estas personas y trasladar estas muestras de comportamiento hacia un porcentaje de la población. Y por tanto, permite prever cuál sería la respuesta de un porcentaje de la población ante un estímulo de comunicación o una propuesta cultural entre otras muchas acciones. Claire y Cimeon comentaron que con Arts Data Impact tratan de conocer a las personas y de hacer el mejor uso de la información que disponen en beneficio de la sociedad.
A este respecto, debemos recordar que recientemente el CCCB –Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona- realizó una interesante exposición coproducida junto con la Fundación Telefónica y titulada “Big Bang Data“ donde se exploraba la emergencia de la base de datos como un marco de pensamiento cultural y político, ante los efectos de la actual datificación del mundo.
Para quienes no pudisteis visitar la exposición “Big Bang Data” del CCCB de Barcelona, os animamos desde el Máster Universitario en Gestión Cultural de la Universitat Internacional de Catalunya a visitarla en la Fundación Telefónica de Madrid, del 12 al 24 de mayo de 2015.