Miguel Ángel Osorio Hernández es estudiante del Máster Universitario en Gestión Cultural de UIC Barcelona y becado en 2023 por el Sistema de Apoyos a la Creación y Proyectos Culturales (SACPC) y el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (CONAHCYT) del Gobierno de México.
Gestor Cultural, fundador y director de la agencia “Emprendedores Culturales e Industrias Creativas A.C.”, ha diseñado y gestionado fondos para festivales internacionales y más de 20 proyectos vinculados a la música, el teatro, la danza y otras disciplinas. Es licenciado en Literatura Dramática y Teatro por la UNAM, cuenta también con diplomas en Dirección de Empresas Culturales por la Universidad Autónoma Metropolitana y en Comunicación Digital y Social Media en eCommerce por el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey. Ha sido beneficiario de varios estímulos fiscales y fondos de ayuda para las artes escénicas, como por ejemplo los Fondos de Ayudas para las Artes Escénicas Iberoamericanas – IBERESCENA.
Después de estudiar Licenciatura en Literatura Dramática y Teatro, ¿Qué te llevó a dedicarte a la gestión de proyectos culturales y fundar tu propia empresa?
Mi camino en la gestión cultural comenzó en 2010, mientras cursaba la licenciatura en Literatura Dramática y Teatro en la UNAM. Durante este año realicé un curso de verano en el Círculo de Bellas de Artes de Madrid. En este curso descubrí más sobre esta profesión y conocí la agencia Asimétrica, que me inspiró a crear en México la primera agencia de gestión cultural del país “Emprendedores Culturales e Industrias Creativas AC”.
A través de la gestión cultural encontré un camino para materializar ideas, tanto mías como de otros artistas y creadores, una labor constante que he desarrollado ininterrumpidamente durante más de catorce años.
Decidí crear mi propia empresa por un deseo de autoafirmación y de demostrar mis capacidades; aunque al principio fue un camino duro ya que enfrenté resistencia por parte de instituciones. Amo lo que hago y me apasiona acompañar a otros en la realización de sus sueños. Las enseñanzas de mis padres han sido dos pilares fundamentales en mi empresa: de mi madre, aprendí la visión y el deseo de explorar el mundo, y de mi padre, la disciplina y la fe de creer en uno mismo.
¿Cuáles han sido los principales retos como emprendedor cultural en Latinoamérica?
El primer reto fue lograr que las instituciones mexicanas creyeran en mi trabajo. Al inicio, muchos desconocían el término “gestor cultural”. Uno de mis primeros proyectos fue el “Transperceptual: Festival Internacional de Teatro Sensorial por la Inclusión”, y recuerdo que fue difícil lograr que las instituciones me recibieran y aceptaran mi trabajo, al no desempeñar la labor de dirección ni artística.
Otro reto importante fue la aceptación de mi labor docente. Hace catorce años, la gestión cultural era relativamente nueva en México, y mi agencia fue pionera en ofrecer capacitación en este ámbito. A menudo, los funcionarios públicos dudaban de la necesidad de formación específica para la procuración de fondos, aunque es evidente que los proyectos culturales requieren de recursos económicos para materializarse.
A lo largo de estos años, he gestionado cinco festivales internacionales, producido piezas coreográficas y teatrales, y desarrollado proyectos culturales comunitarios, generando empleo para agentes culturales y un impacto significativo en diversas ciudades de México, como en Ciudad de México, Guadalajara, Monterrey y Querétaro, entre otras.
¿Cómo es el sistema de convocatorias, estímulos y becas para artistas y gestores en México comparado con Barcelona?
El sistema de financiamiento cultural en México ha evolucionado considerablemente en los últimos 5 o 6 años. Los procedimientos de solicitud son principalmente a través de plataformas digitales, con fechas específicas y requisitos cada vez más complejos. Los postulantes deben tener conocimientos en el ámbito cultural, pero también en finanzas, comunicación, propiedad intelectual y temas fiscales y contables.
Aunque el proceso es similar en Barcelona, las cantidades otorgadas suelen ser mayores. Sin embargo, esta es solo una percepción basada en mi experiencia y aún estoy investigando más sobre las diversas convocatorias de ayudas y becas en Barcelona.
¿Cómo ha influido Barcelona y el Máster Universitario en Gestión Cultural de la Universitat Internacional de Catalunya en tu desarrollo personal y de tu empresa?
Estudiar en Barcelona y cursar este Máster en gestión cultural en la Universitat Internacional de Catalunya me ha ayudado a poner mucho más en orden el trabajo que venía desarrollando. Ha sido un proceso de conceptualización y sistematización que ha acelerado significativamente mi carrera profesional. Además, me ha permitido identificar nuevas áreas de desarrollo para mi empresa, como la internacionalización de proyectos culturales.
Por otro lado, contar con un título de Máster Universitario en Gestión Cultural ha sido un logro personal importante. Aunque he ejercido como gestor cultural durante muchos años, obtener esta titulación ha mejorado la recepción de mi trabajo en el sector. Siempre he creído que el conocimiento no sirve de mucho si no se comparte y se aplica. Mi éxito se basa en estudiar, aplicar lo aprendido y seguir adelante a pesar de los desafíos, recordando que no sólo se aprende en la escuela sino también en la vida, haciendo las cosas, con amor, dolor, miedo, y lo que se siente, acertando a veces equivocándome otras, y siempre levantándome para seguir adelante.